Granada se queda en la fase 0. La última semana en Granada ha sido una auténtica feria de salidas: Irresponsabilidad y absoluta inconsciencia.
Somos el furgón de cola de la desescalada. Sólo nos faltaba el factor Covid-19 para pensar lo injusto que resulta formar parte de esa mitad de España que hoy lunes no podrá ir de terrazas a tomar el sol y tapear, no podemos salir de compras sin cita previa, ni quedar con la familia y los amigos aunque sea en grupos de diez.
La situación está mal en la capital y el Área Metropolitana pero también hay distritos sanitarios como la Costa, la Alpujarra o la Zona Norte limpios de Covid-19 que podrían haber avanzado.
Granada se queda en la fase 0 y las persianas siguen echadas, sólo unos pocos se han atrevido a quitar el candado.
Las playas se usan para hacer deporte, los paseos marítimos que estaban llenos de vida, sólo hay alguna tienda de comestibles abierta.
Hay pocos locales abiertos en Granada, los hosteleros también se han rebelado con la campaña Mejor cerrados que arruinados.
Hay 100.000 trabajadores en paro y más de 50.000 afectados por un ERTE.
La Policía patrulla las calles donde los vecinos van con mascarillas a un destino fijado antes de salir de casa.
Nos situamos como un punto negro en el mapa nacional. Nos acompaña Málaga y se quedan también a las puertas Madrid y Barcelona, tres provincias manchegas y varios territorios de Castilla y León, Cataluña y Valencia.
No habrá que esperar los 15 días que fijó inicialmente el Gobierno Central,el gobierno andaluz elevará una nueva propuesta para pasar de fase. Y el viernes, el Ministerio de Salud volverá a revisar los parámetros. Granada tendrá una posibilidad en entrar en la fase 1, como pronto, el 18 de mayo.